Papeles del Psicólogo, 1984. Vol. (16-17).

Giuseppe Fumai

Presidente de la Societá Italiana de Psicología (SIPs).

En 1971 se creó la Licenciatura de Psicología en las Universidades de Roma y Padua, en el ámbito de la Facultad de Magisterio. Su duración es de cuatro años, subdivididos en dos bienios, con un total de 21 exámenes (prueba de inglés incluida), más tesis de licenciatura.

En 1971 se creó la Licenciatura de Psicología en las Universidades de Roma y Padua, en el ámbito de la Facultad de Magisterio. Su duración es de cuatro años, subdivididos en dos bienios, con un total de 21 exámenes (prueba de inglés incluida), más tesis de licenciatura.

El primer bienio comprende las siguientes materias de estudio: Psicología General (I y II), Psicología Fisiológica (I y II), Psicología Evolutiva (I y II), Estadística Psicométrica, Sociología, Psicología Social, Pedagogía y examen escrito en Lengua Inglesa.

El segundo bienio se subdivide en tres especialidades: didáctica, aplicada y experimental.

La especialidad didáctica prevé como enseñanzas fundamentales: Psicopedagogía, Historia de la Filosofía, Historia Moderna o Historia Contemporánea. Psicología Dinámica, más seis enseñanzas complementarias, de las cuales una es de materia pedagógica y una de materia filosófica.

La especialidad aplicada, prevé como enseñanzas fundamentales: Psicopatología General y Evolutiva, Teoría y Técnicas de Investigación de la personalidad (I y II), Teorías de la Personalidad, Psicología Dinámica, más cuatro enseñanzas complementarias a elegir entre: Psicología del Trabajo, Historia de la Psicología, Neuro-psiquiatría Infantil, Psicología Clínica, Psicología de la percepción, Física, Neurofisiología, Climinología, Genética, Psiquiatría.

La especialización experimental prevé como enseñanzas fundamentales: Biología General, Matemáticas, Psicometría, Técnicas Experimentales de Investigación, Metodología de la Investigación Psicológica, Psicolingüística, Psicología Animal y Comparada más enseñanzas complementarias a elegir entre aquella: arriba indicadas.

El Consejo de la Facultad hi establecido que sean admitidos a los exámenes de tercer año los estudiantes que hayan superado al menos los tres exámenes bienales del bienio de base (Psicología General dos anualidades, Psicología de la Edad Evolutiva dos anualidades, Psicología Fisiológica dos anualidades) y la prueba de Lengua Inglesa.

Para los estudiantes que pretenden seguir la especialidad experimental, además de los exámenes precedentes, se requiere la superación de los exámenes de Estadística Psicométrica.

Se calcula que desde 1975, en la práctica diez años, se han licenciado en Psicología alrededor de 10.000 personas, de las cuales el 90% lo han hecho en la especialidad aplicada y el resto, el 10%, en las otras dos especialidades: didáctica y experimental.

El campo profesional estimula pues el interés de los estudiantes y la orientación de los estudios.

La enseñanza de la psicología está prevista también en otras Facultades: Letras, Filosofía, leyes, Ciencias y Medicina.

Una Ley del 11 de julio de 1980 ha aprobado normas sobre la "reordenación de la docencia universitaria, formación, experimentación, organizativa y didáctica". Están previstos profesores ordinarios, asociados, investigadores y becas de estudio para "doctorado de investigación". La Universidad puede instituir "departamentos", que promueven y coordinan la actividad de investigación, a los que pertenecerán los docentes de materias afines de la misma ciudad, aunque sea de Facultades diversas.

Ciento diez Cátedras de Psicología están asignadas a profesores ordinarios (52 Cátedras de Psicología, Psicología General, Historia de la Psicología; 48 Cátedras del grupo de Psicología Social y del Desarrollo: Evolutiva, Psicopedagogía, psicolinguística, etc.; 10 en disciplinas diversas como: técnicas de indagación de la personalidad, dinámica, psicología escolar, etc.).

Ciento treinta Cátedras de Psicología son asignadas a profesores asociados. (70 Cátedras de Psicología general, etcétera; 50 Cátedras de Psicología Social y Desarrollo; 10 Cátedras de disciplinas diversas). A las cátedras de los profesores ordinarios o asociados están asignadas la mitad de investigadores. El número de becarios en doctorado de investigación es mucho más limitado.

En el curso 1984 se han convocado concursos para 24 Cátedras de Psicología (9 del grupo primero; 11 del grupo segundo y 4 del tercero).

Volviendo a los cursos de licenciatura en Psicología de Roma y Padua, debo recordar que en 1980 fue presentado al Ministerio de Enseñanza Pública un "proyecto de reestructuración del curso de licenciatura en Psicología", que preveía llevar la duración del curso de cuatro a cinco años, subdivididos en un bienio destinado a la preparación de base común a todos los estudiantes, y un trienio destinado, fundamentalmente, a la preparación específica y ordenado según las siguientes cuatro especializaciones:

- La especialización de Psicología del Desarrollo y de la Educación.

- La especialidad Clínica y de Comunidad.

- La especialidad Psicología Social y del Trabajo.

- Especialización de Psicología General y Experimental.

Las tres primeras especializaciones están destinadas a proporcionar una preparación profesional específica; el cuarto a su vez está destinado a ofrecer ulteriores conocimientos e instrumentos para llegar a la profesión de investigador.

El proyecto para el examen del Comité Universitario Nacional podría aprobarse en breve fecha.

Con la aprobación del proyecto están previstos otros cursos de licenciatura en Psicología, en las Universidades de Palermo, Nápoles, Milán, Turín, ya aprobados en los respectivos consejos, con evidentes ventajas para los estudiantes de aquellas zonas.

Las Escuelas de especialización en funcionamiento en Italia son 9 (Milán 2, Católica y Estatal; Pavía, Bolonia, Génova, Siena, Roma, Nápoles y Palermo). Están previstas, pero no en funcionamiento, otras 3 (Roma, Padua y Turín). La duración del curso de especialización es de tres años. En relación a la disposición de la CEE estas escuelas han concordado articularse en las siguientes orientaciones:

- Médico(para licenciados en Medicina y Cirugía).

- Clínico y de comunidad (para licenciados en Psicología, para licenciados en otros cursos de orientación psicológica, o que hayan superado 6 exámenes de psicología y hayan discutido una tesis de materia psicológica).

- Del desarrollo y de la educación (abierto a los licenciados en cualquier disciplina).

- Social y del Trabajo (igual que la anterior).

- Jurídico (igual que las anteriores).

Las 9 escuelas de especialización fueron creadas antes de la apertura de los cursos de licenciatura de Roma y de Padua. Las nuevas especializaciones son recientes, pero los planes serán revisados después que el "proyecto de reestructuración" sea aprobado por el Ministerio de la Instrucción Pública. Actualmente está en curso una nueva elaboración, porque la Comunidad Europea ha dispuesto que en todas las escuelas de especialización de la Comunidad el bienio debe ser Igual para todas las escuelas.

Entre licenciados en psicología y especializados se calculan quince mil personas.

En cada país existen numerosas asociaciones de formación ligadas a la pluralidad de las técnicas psicoterapéuticas o a las especializaciones psicoanalíticas. Pero son simples asociaciones, que más allá de la específica competencia profesional o académica, reúnen a todos los psicólogos.

En Italia esta asociación está representada por la SIP-Societá Italiana di Psicologia, una asociación científico-profesional de psicólogos. Tiene la finalidad de promover el progreso de los estudios y de las investigaciones en las varias ramas de la psicología y sus aplicaciones, en armonía con las exigencias de una sociedad humana en evolución. Está fundada en 1910 y tiene la sede legal en Roma. Desde su fundación ha tenido 14 presidentes, 13 docentes y un profesional.

Reúne 4.000 socios; operan en el área docente el 40% y en el área profesional el 60%.

Está dirigida por un Consejo directivo nacional, compuesto por seis miembros, que duran en sus cargos tres años. El presidente es el candidato que recebe mayor número de votos. Los miembros del Consejo Directivo se reparten equitativamente (3 docentes y 3 profesionales). El presidente saliente entra en la nueva directiva con el puesto de past-presidente.

Periféricamente la SIPs está dirigida por las Delegaciones regionales luna por cada región italiana) que es competente de los problemas de la Psicología en su territorio. Cada sección regional tiene un consejo directivo.

Punto fuerte de la actividad de la SIPS, son las Divisiones Científico-profesionales, a las que los socios se adhieren, pero son titulares de una sólo. Actualmente operan 8 Divisiones: jurídica, investigación de base, trabajo y organización, clínica, social, desarrollo, comunidad y educativa. También las Divisiones están dirigidas por un Consejo. Tareas de las Divisiones son la organización, la tutela o la disciplina de la actividad didáctica, de investigación y profesional de los psicólogos que operan en sus campos científicos.

Las Divisiones tienen cada año un Congreso, igual que las secciones regionales que se dedican con particular preferencia a los temas de la profesión.

Órgano oficial de la sociedad es "Psicología italiana" revista bimestral, que actualmente tiene una tirada de 4.000ejemplares.

La Sociedad está poniendo a punto un Código Deontológico, pero al mismo tiempo este aspecto está sancionado por un artículo de su Estatuto.

La Sociedad, además de la revista, ha dado vida en los últimos años a algunas publicaciones puestas a disposición de los socios.

La Sociedad organiza cada tres años el "Congreso nacional de los psicólogos italianos". Este año, en septiembre, del 7 al 12, ha tenido lugar en Bergamo (una ciudad de Lombardía, cercana a Milán) el XX Congreso. El primero tuvo lugar en Turín, en 1911.

Este Congreso se tituló "Hacia un futuro del hombre". Puso el acento en los estudios y la investigación psicológicas en dirección del hombre que opera y se mueve hacia el futuro.

La apuesta por el futuro no es un descubrimiento reciente o una moda como demuestran los numerosos congresos nacionales e internacionales sobre este tema fascinante. Es una apuesta que los psicólogos italianos y de todo el mundo han hecho en su empeño cotidiano en dirección del nombre, por darle en cada momento respuestas concretas.

Una iniciativa parlamentaria que interesa a la comunidad psicológica italiana es la prevista por la SIPs en 1972, y llevada adelante en 4 legislaturas, sobre el "reconocimiento jurídico de la profesión psicólogo". Una propuesta de Ley fue aprobada por dos legislaturas en el Senado, pero no pasé en la Cámara. En esta legislatura se han presentado 5 propuestas de Ley que están en discusión en las dos cámaras del Parlamento italiano. Tenemos buenas relaciones políticas para su aprobación definitiva.

Para las relaciones internacionales debo recordar que la SIPs es miembro:

- de la IUPsyS (internacional Union of Psychological Secience)

- de la FEAP (Federation Europeenne des Associations de Psychologues), y desde 1982 ha establecido relaciones de colaboración con el

- Colegio Oficial de Psicólogos (intercambio de publicaciones y participación en Congresos).

- Société Française de Psychologie.

A título personal muchos socios de SIPs están también adheridos a la AIPA (Association Internacionale de Psychologie Appliquee), a la ICP (International Council of Psychologist) y tiene relación con Colegios universitarios y profesionales extranjeros.

El movimiento sindical de los psicólogos es inexistente y ligado a grupos pequeños o locales; nunca constituye un movimiento de masa.

En Italia, la profesión psicólogo no tiene un reconocimiento jurídico. La SIPs se ha hecho promotora desde hace más de diez años de una iniciativa parlamentaria. Actualmente el Parlamento italiano está examinando cinco proyectos. Hay perspectivas favorables de que los cinco proyectos sean reunidos en uno y aprobados en esta legislatura.

Los motivos de fondo que están en la base es este retraso del reconocimiento legal son debidos a la oposición de otras fuerzas profesionales (médicos) que mantienen que el ejercicio de la psicoterapia no compete a los psicólogos.

La Ley Sanitaria autoriza a los licenciados en Medicina a ejercitar psícoterapias con el uso de fármacos. Los psicólogos sostienen que la psicoterapia psicológica usa el lenguaje como medio de ayuda y por tanto es otra cosa distinta que la actividad médica.

En la base de estos motivos, que incluyen intereses económicos y formativos de gran relieve, está, en nuestro país, la falta de reconocimiento de la profesión psicólogo.

Sin la "psicoterapia" la ley italiana estaría aprobada desde hace muchos años; pero los psicólogos italianos hacemos de ellos un punto de honor por lo que continúa la lucha aunque hasta hoy con resultados negativos para nosotros.

Algunos psicólogos han sido condenados por la magistratura, por abuso de la profesión sanitaria, por ejercitar la psicoterapia; pero desde algunos años la magistratura ha sido sensibilizada al problema y las sentencias son casadas.

Los puntos esenciales del proyecto de Ley sobre el reconocimiento son:

- El ejercicio de la profesión psicólogo está subordinado al examen de estado y a la inscripción en el Registro.

- Son admitidos al examen de estado los licenciados en psicología.

- El ejercicio de la actividad terapéutica, incluida la analítica, está subordinado a una específica formación personal profesional que se adquiere después de la licenciatura a través de institutos de trayning universitarios o reconocidos por el Estado.

- Consejo de la profesión con sede en cada región.

- Norma transitoria: cooptación, admisión de psicólogos que hayan actuado en las instituciones públicas; psicólogos con diploma de especialización, licenciados en disciplinas distintas que hayan actuado en instituciones públicas de dos a cinco años.

Las categorías admitidas en la norma transitoria celebrarán una sesión especial de examen por el "título".

En esta situación especial de precariedad en la que no hay todavía un reconocimiento legal, la SIPs ha encargado a una Comisión estudiar un proyecto de autorrelación de la profesión. Se trataría de reglamentar de modo privado la profesión, partiendo de una atenta obra de autodisciplina.

a) El reconocimiento jurídico de la profesión por parte del Parlamento italiano.

b) Aprobación por parte del Ministerio de la instrucción pública del proyecto de reestructuración de la licenciatura en psicología llevando su duración desde los cuatro años actuales a cinco años con cuatro especialidades, más cercanas a las exigencias de nuestra sociedad.

c) Adecuación de las escuelas de especialización para el primer bienio a las normativas de la CEE, adecuando las especializaciones a las demandas del mercado del trabajo.

d) Apertura de nuevas sedes universitarias con otros cursos de licenciatura de psicología para responder cada vez más la necesidad de formación de este ámbito.

e) Activas los actuales planes de estudio, reforzando las especializaciones existen (didáctica, aplicada y experimental) en sentido experimental (los pocos licenciados con especialización experimental, resultan más preparados para afrontar los fenómenos psico-sociales del mercado de trabajo).

f) Demanda de la reforma institucional del país, (es decir la reforma sanitaria) para lograr un mayor compromiso de los Psicólogos en el sector público, en el ámbito de las unidades sanitarias, locales (toxicodependencia, comunidad terapéutica, salud mental, medicina del trabajo, ancianos, handicapados, consultorio familiares, materno infantil, carcelario, hospitalario, jurídico, etc.)

g) Más orgánica actuación de los Psicólogos en la Escuela Pública y reactivación de los Servicios Psicopedagógicos.

Aspectos esenciales para una profesión correcta son: formación de base rigurosa con orientación experimental, adecuados "training" específicos después de la licenciatura, reciclaje continuo.

Si es cierto que donde hay hombres hay espacio para la psicología están verdad que tal espacio no se ocupa automáticamente por psicólogos, los cuales deben saber adquirirlo con competencia, teniendo cuidado de perseguir sobre todo objetivos de utilidad social, dispuestos y prontos a intervenir en esa dirección sus mejores energías.